Nuestro papel: soluciones personalizadas para la industria farmacéutica y cosmética.
En cuanto a la industria farmacéutica, incluye dos actividades principales:

Química fina, que debe ocuparse de residuos altamente contaminantes en grandes volúmenes (agua salina, disolventes, fondos de destilación).
La producción farmacéutica, que se enfrenta a la necesidad de eliminar residuos como la fabricación de chatarra y una gran variedad de residuos empaquetados (citotóxicos, muestras de laboratorio, por ejemplo) y envases contaminados.

Tres farmacopeas gobiernan la producción de agua para uso farmacéutico en el mundo: Estados Unidos (USP35), Farmacopea Europea y Cosmética (EP7) y Pharmacopée et cosmétiqueJaponesa (JP). La industria farmacéutica no tiene otra alternativa que cumplir con los requisitos de Buenas Prácticas de Fabricación (GMP) y farmacopeas, incluida la elección de su sistema de producción de agua. Una calidad del agua que debe ser muy alta si entra en contacto directo o indirecto con el producto terminado.

En lo que respecta a la industria cosmética, el agua es el ingrediente principal, en primer lugar cuantitativamente, pero también por su importancia en la formulación, o su papel con respecto a la fisiología cutánea. Esta industria requiere la estabilización de la calidad del agua en términos de composición, para garantizar una buena reproducibilidad de las fabricaciones.

La industria cosmética también genera una gran cantidad de aguas residuales. Estas aguas contienen altos niveles de surfactantes (sustancias químicas que podemos encontrar en champús y jabones), tintes, aceites y emulsiones, detergentes … Etc. Durante el proceso de reciclaje, también se debe tener en cuenta que los lotes de productos manufacturados cambian con demasiada frecuencia, y sus procesos de fabricación generalmente forman espuma y, por lo tanto, las características de las aguas residuales a tratar.

La competencia clave de WATERTECH SA: soluciones personalizadas para la industria farmacéutica y cosmética, que respetan, por un lado, las farmacopeas describen las cualidades fisicoquímicas y microbiológicas necesarias para cada agua «monografiada», los métodos de análisis para Acepte su conformidad y su (s) modo (s) de generación.
Por otro lado, las Buenas Prácticas de Fabricación Europeas (GMP) que describen los preceptos que se deben aplicar en la operación, mantenimiento y monitoreo de los sistemas de tratamiento de agua para uso farmacéutico y cosmético.